domingo, 27 de enero de 2008

LA BOLA DE CRISTAL 2008 (V)

LA POLÍTICA INTERNA
Los siguientes elementos dominarán la escena política.
- Descontento Creciente. La ciudadanía aumentará su desconfianza con el régimen. La inseguridad y el desabastecimiento continuarán siendo motivo de protesta popular a la vez que la errática conducta externa del presidente provocará una oleada de críticas internacionales con enorme repercusión local. La popularidad del régimen continuará decreciendo y para el cuarto trimestre del 2008 habrá llegado a niveles de rechazo alarmantes. Es contra este telón de fondo que actuarán las fuerzas políticas que se oponen al régimen.
- Partidos Políticos. El 2008, si se sabe aprovechar, será el año de la recuperación de los partidos políticos y de su definitiva aceptación popular como instrumentos imprescindibles para el quehacer político dentro de una democracia. Contra esta necesaria percepción positiva atentarán ambiciones personales e institucionales que pretenderán imponer candidaturas en las elecciones regionales. No hay duda que se presentarán dificultades para la selección definitiva de los candidatos que se opondrán al oficialismo pero, al final, la mayoría de las candidaturas se lograrán por consenso.
- El Chavismo. Se acentuarán las diferencias entre los distintos grupos que apoyan al régimen. La selección “a dedo” de los candidatos a competir por ser electos en los comicios regionales será motivo permanente de disputa y, al final, quedarán numerosos cadáveres políticos en el camino. Al régimen le será casi imposible mantener el concepto de “autoridad única” en cabeza del presidente (algo ya fuertemente cuestionado). El gobierno no tiene ideología, no tiene planes estructurados, no tiene una causa común que no sea la ciega lealtad al presidente. Disminuida ésta y, ante la muy real posibilidad de una catástrofe electoral en las regionales, los diferentes grupos oficialistas tendrán más razones para separarse que para unirse. En el año 2008 el gran reto político será lograr la unidad de propósito tanto para la oposición como para el oficialismo. Por primera vez los que apoyan al régimen corren el peligro de estar más desunidos que la oposición. Esta última parece haber aprendido la lección de lo negativo de la desunión. El oficialismo apenas empieza a sentir ese mal y pronto sufrirá las consecuencias políticas de tener un líder disminuido y sin relevo.
LAS ELECCIONES REGIONALES
Aunque no se celebrarán hasta octubre/noviembre (si no se atrasan aún más), constituirán el evento político del año para el cual todos los grupos políticos del país deben empezar a prepararse ya.
La oposición política ha escogido al voto como el arma principal para derrotar al régimen. Con los resultados del Referéndum de diciembre se derrotó a la abstención y se comprobó que con testigos entrenados en cada mesa no es posible un fraude electrónico sin que sea detectado. Una nueva derrota electoral en las regionales, pondría al régimen en la urgente necesidad de negociar con otras fuerzas políticas del país o no poder gobernar. Esta pérdida de poder político, en el caso de este régimen, será mucho más traumática que la que se generaría en una democracia verdadera donde el poder ejecutivo está siempre sometido a controles de los otros poderes. Aprender a gobernar sin poderes absolutos, como los ostentados hasta ahora, será tarea dificilísima y el presidente sufrirá en carne propia por el tremendo error cometido al buscar súbditos en lugar de aliados.
En lo político, el año 2008 será el comienzo de la recuperación del sistema democrático en Venezuela.
“Eso”… o el caos.

domingo, 20 de enero de 2008

LA BOLA DE CRISTAL 2008 (IV)

PROBLEMAS SOCIALES
La crisis económica descrita en La Bola de Cristal (III) y la inhabilidad del régimen para controlar la inflación y el desabastecimiento aumentará el descontento social. A esto habrá que agregarle la inseguridad ciudadana y el desempleo como detonantes del descontento que, además, tiene muchas otras razones para mantenerse como la constante del ciudadano venezolano.
En numerosos conglomerados humanos del país escasea el agua, se interrumpe el servicio eléctrico con regularidad y los teléfonos públicos son de difícil acceso.
Las carreteras nacionales y urbanas en su inmensa mayoría requieren de urgente mantenimiento y vialidades importantes no terminan de construirse.
Las escuelas bolivarianas y otras del sector público, alguna vez promesas de excelencia, empiezan a deteriorarse sin haber terminado su construcción, en otros casos ni siquiera se ha iniciado. El abandono escolar sigue a niveles inaceptables y la inscripción en preescolares y escolaridad básica muestran niveles de exclusión alarmantes.
Los servicios de salud, salvo los muy primitivos de “Barrio Adentro”, en algunos casos ya también en franco deterioro, son una vergüenza nacional. Hay carencias de los insumos básicos para la atención del paciente y su planta física en la mayoría de los casos requiere urgente remodelación.
El Seguro Social exhibe los vicios de siempre. Parece increíble que un gobierno que ha recibido en nueve años los ingresos mayores de la historia de nuestro país no haya sido capaz de diseñar y financiar un sistema solidario de seguridad social que le brinde a la población servicios de salud adecuados, pensiones de vejez dignas y oportunas y un seguro de desempleo, imprescindible para que quienes han quedado sin empleo puedan subsistir hasta solucionar su situación.
El déficit de vivienda crece anualmente y en un país cuyas empresas de construcción públicas y privadas alguna vez estuvieron a la vanguardia de sus similares de América del Sur, ahora es incapaz de construir 100.000 viviendas al año, cifra que con menos dinero y tecnología se logró en el pasado.
Nuestras cárceles son verdaderos antros donde ni el más inclemente criminal merece estar. Las muertes ocultadas en esos calabozos de la desesperación deben ser inmencionables por la vergüenza que le debería causar a nuestros ciudadanos conocer los crímenes y las violaciones que allí se cometen.
Nuestros servicios de vigilancia y protección al ciudadano están infiltrados por el hamponato que pretenden combatir, lo cual deja al ciudadano indefenso ante la criminalidad rampante.
En resumen, toda esta situación resulta en un deterioro visible de la calidad de vida del venezolano.
Ese es el panorama con el cual el país se abre al 2008. Lo trágico es que el régimen actual alega tener como objetivo el combate a la exclusión y a la pobreza. En otras palabras, proveerle al ciudadano de un ambiente que le permita una vida digna y feliz. Pero la dura realidad pone en entredicho la sinceridad de la oferta.
¿Por dónde comenzará el régimen en el 2008 a corregir lo que es inaceptable? ¿Combatirá la inseguridad ciudadana? Hay algunas señales de que al fin el régimen parece estar dispuesto a tomarse en serio este problema.
¿Se diseñara un programa de solidaridad social incluyente y solidario? Lo dudo.
Dada las dificultades económicas con las cuales tropezará el régimen y su resistencia a incorporar al sector privado al esfuerzo del crecimiento y el desarrollo, no veo mejoras significativas en la calidad de vida del venezolano en el año 2008.

domingo, 13 de enero de 2008

LA BOLA DE CRISTAL 2008 (III)

PETROLEO
Se dice que una mentira repetida mil veces se convierte en una verdad. No es el caso de la producción petrolera en Venezuela. Por mucho que el régimen se empeñe en anunciar niveles de producción por encima de 3 millones de barriles diarios (b/d), lo que todas las agencias y publicaciones especializadas saben es que nuestra producción está alrededor de los 2,5 millones b/d. Si hubiesen controles adecuados la diferencia entre lo reportado y lo real sería obvia. Sin embargo, hay todavía unas pistas que pueden seguirse. El presupuesto del año 2008 incluye una exportación de 3.2 millones b/d. El precio estimado es $ 35 por barril, lo cual dará un ingreso diario de $112 millones y $40.800 millones al año. Si dividimos ese monto presupuestado entre los volúmenes reales de exportación (1.8 millones b/d) conoceríamos el precio mínimo al cual tendríamos que vender el barril de petróleo para generar ese ingreso. La cifra es de $62 por barril. Es posible que el precio real por barril supere esa cifra en el 2008, pero no por mucho. El cálculo anterior se basa en que todos los barriles exportados se vendan al precio del mercado pero, como es sabido, unos 300.000 b/d se colocan a precios subsidiados. Esto causa que el ingreso petrolero disminuya y, por ende, los barriles que cobramos habría que venderlos a mayores precios para lograr el ingreso presupuestado. La conclusión es que el ingreso petrolero probablemente será menor que el de 2007, mientras que el gasto público aumentará.
En el año 2008 continuarán las deficientes prácticas operativas. Las inversiones estarán por debajo de lo requerido para mantener el nivel actual de producción. En las refinerías seguirán proliferando los accidentes. Continuarán las dificultades para obtener nuevos taladros. El régimen seguirá exprimiendo la caja de PDVSA y las nuevas alianzas no darán frutos concretos. PDVSA continuará su indetenible caída hacia un colapso total pero, eso si, el discurso de “ahora PDVSA es de todos” seguirá retumbando. El problema es que ahora lo “de todos” vale mucho menos.
ECONOMIA
Dada la caída esperada en el ingreso petrolero, la ineficiencia del sector público y el vapuleo constante del sector privado, aunado al desabastecimiento, la inflación, la reconversión monetaria y el alza del gasto público, el año 2008 presentará grandes dificultades de caja para el régimen.
El mayor peligro para el 2008 será la inflación. El régimen se enfrentará a un dilema que no ofrece salidas positivas. El control de precios, algunos por debajo de los costos reales de producción doméstica y de importación, ha producido un desabastecimiento que amenaza con convertirse en un gran problema nacional. De mantener precios artificiales el desabastecimiento continuará y será inevitable la conflictividad social. Si el régimen “flexibiliza” los precios hasta su punto de equilibrio real, la inflación se disparará, la gran mayoría de la población no podrá pagar por los bienes que ahora estarán en los anaqueles y el deporte nacional será la búsqueda de los culpables por esa situación.
En el segundo caso el gobierno pudiera intentar “correr la arruga” hasta el 2009, subsidiando a través de Mercal los precios de los productos básicos. Esto nunca será eficiente y se prestará a que continúe la corrupción existente. Un aumento de los subsidios sólo incrementará el déficit de caja y presionará por una devaluación del “bolívar fuerte”, lo cual políticamente sería gravísimo.
El año 2008 se vislumbra como el año de la crisis económica del régimen.

domingo, 6 de enero de 2008

LA BOLA DE CRISTAL 2008 (II)

LAS RELACIONES INTERNACIONALES (El boomerang)
BOLIVIA. El régimen de Bolivia no parece tener la fortaleza para subsistir salvo que diese un golpe de timón ideológico (difícil). Su fracaso será visto como el fracaso de intentar copiar en ese país lo que se intentó, sin éxito, imponer en Venezuela.
ESTADOS UNIDOS. Dada las dificultades que tiene el ingreso petrolero para cubrir el enorme gasto público comprometido, el régimen entenderá la importancia que, para su continuidad, tiene el mercado energético de los Estados Unidos. Insistir en amenazar con cortar el suministro petrolero a ese país es un juego muy peligroso (Será menos difícil para los Estados Unidos sustituir nuestro petróleo que para nosotros buscar otros mercados).
En lo político el presidente Bush, blanco favorito de los insultos de Chávez, entregará la presidencia a fines de año. Eso le dará a Chávez la oportunidad de establecer una nueva relación con los Estados Unidos, algo que el partido demócrata pudiera estar dispuesto a buscar. No será fácil. Durante el 2008 se pudieran presentar incidentes, dentro y fuera de Venezuela que afecten negativamente las relaciones con el Norte (Colombia. Terrorismo. Narcotráfico. Caso del “maletín”). El discurso anti Estados Unidos se está agotando por repetitivo e inconsecuente, mientras que la necesidad de mantener una buena relación con el Norte se hace cada día más necesaria. Sin embargo, Chávez sólo reaccionará positivamente si el nuevo presidente de los Estados Unidos le hace una invitación personal a la Casa Blanca. Cuestión de ego.
OTROS PAISES
ECUADOR. Amistad, casi un compromiso. Perú. Cordialidad distante. Brasil y Argentina. Amistad interesada. Chile. Amistad fría. Paraguay y Uruguay. Amistad colonizada. Con los países del Cono Sur las dificultades normales a superar para el ingreso de Venezuela al club pudieran desatar, una vez más, la incontinencia verbal de Chávez con lo cual pondría en peligro las relaciones de Venezuela con esos países.
CHINA. Sin duda el país con el cual conviene mantener una relación comercial intensa. No es a mediano plazo, una alternativa al mercado de los Estados Unidos para colocar nuestro petróleo, pero es una alternativa de diversificación energética importante. China está interesada en invertir en Venezuela. En materia petrolera aspira obtener mayores condiciones globales que las otorgadas a otros países. La empresa petrolera estatal china es competente y negocia con firmeza. Su personal tiene problemas de adaptación a la cultura del país. Los equipos petroleros suministrados a la fecha han tenido problemas operativos. Durante el 2008 la relación entre Venezuela y China continuará de manera fluida.
IRAN. A pesar de los múltiples convenios firmados la alianza Venezuela-Irán no tiene bases muy firmes para sostenerse a largo plazo. Ni para complementariedad industrial-comercial ni como fuente de inversiones y tecnología tiene Irán mucho que ofrecer. La “hermandad” actual es casi exclusivamente de carácter político y tiene la fragilidad que exhiben las relaciones entre países que dependen de “acuerdos por arriba” entre dos lideres. Un cambio de gobierno en cualquiera de los dos países pudiera regresar la relación a la de naciones que comparten intereses en la OPEP. Muy poco más.
RUSIA. Mientras se mantenga el interés de Venezuela en comprar armamento ruso las relaciones serán fluidas.
UNION EUROPEA. La situación pudiera ser tensa si no mejoran las relaciones de Venezuela con países como España e Inglaterra.