- Insistir en la importancia del voto. Luchar contra la abstención. No caer en las trampas oficialistas que buscan excusas para perder confianza en el proceso y hasta posponerlo, si fuese posible.
- Concluir los acuerdos unitarios para la selección de candidatos a gobernadores en los estados Zulia, Bolívar y Yaracuy y en las alcaldías con varias candidaturas (numerosas en el interior de la República y en Chacao, El Hatillo, Libertador y Alcaldía Mayor).
- Preparar programa “paraguas” coherente para candidatos sobre problemas nacionales. (Seguridad, descentralización y pobreza).
- Asegurar que los candidatos mantengan un discurso inclusivo (gobernar con los mejores y para todos). Ofrecer eficiencia y honestidad de gestión.
- Asistir a los candidatos en la identificación de los problemas críticos de su región.
- Hacerle seguimiento a las disposiciones del CNE a fin de asegurar el cumplimiento estricto de las normas electorales.
Diseñar una estrategia informativa internacional y promoverla a través de las misiones diplomáticas acreditadas en Venezuela.
El día de las elecciones
1) Tener “exit polls” y “conteos rápidos” confiables a fin de adelantarnos a cualquier intento comunicacional del régimen anunciando un resultado electoral favorable.
2) Obtener copia del mayor número de actas posibles y tener testigos confiables en la verificación manual de resultados.
3) Tener preparados mensajes a la nación de acuerdo a los resultados.
Después de las elecciones
- Crear un frente unitario de gobernadores y alcaldes.
- Considerar la posibilidad de solicitar un Referéndum Abrogatorio de las Leyes que atentan contra la descentralización.
- Apoyar la gobernabilidad en las disposiciones constitucionales que consagran la descentralización.
- Establecer vínculos de amistad y cooperación con las instituciones regionales y nacionales, públicas y privadas, ofreciéndoles apoyo para su buena gestión.
- Convocar al Consejo Federal de Gobierno.
- Insistir en la descentralización de los recursos de estados y municipios (Artículo 184 de la Constitución).
- Luchar en las regiones por la posibilidad de generar ingresos adicionales por la vía de cobrar directamente tributos asociados a la explotación de recursos propios.
- Estimular la creación de organizaciones cívicas para que le hagan seguimiento especializado a la gestión municipal y estatal. (Seguridad, educación, salud, vialidad. Etc.)
Por último, algo muy importante. Para organizar campañas electorales, estrategias hacia el futuro y presencia organizada el día de las elecciones se requiere capacidad financiera. Nuestras organizaciones políticas y civiles carecen de recursos mientras que el oficialismo, sin el menor pudor, nutre sus actividades con la savia de los recursos públicos. Es decir, los de todos nosotros.
De manera que aunque nuestra preferencia política este del lado de la oposición, todos financiamos las campañas oficialistas.
Los ciudadanos debemos contribuir financieramente al éxito de nuestra causa. Los partidos políticos y las organizaciones cívicas deberían hacer campañas masivas de recaudación de fondos.
¡A meterse, pues, la mano en el bolsillo!
“No hay almuerzo gratis”