LAS RELACIONES INTERNACIONALES
(El Retroceso) (continuación)
La relación con Venezuela continuará aunque la ayuda que recibirá este país ya no será de igual magnitud. El liderazgo regional de Lula, la pérdida de poder de Chávez, la recesión mundial y la caída de los precios petroleros se confabularán para hacerle aún más difícil a Evo Morales una gestión exitosa. El fracaso del modelo boliviano será visto como un intento frustrado de copiar lo que también se intentó, sin éxito, en Venezuela.
La amistad entre Venezuela y Ecuador es de un frágil compromiso ideológico. El presidente Correa es mucho menos dependiente de Venezuela que Evo Morales, tiene ambiciones de liderazgo regional y posee una instrucción superior en materia económica. No tiene vocación de títere y su relación con Chávez durará hasta que se presente el primer conflicto.
No tiene ni su presidente ni el país el menor interés en establecer alianzas con Venezuela. Tampoco busca conflicto. Mantendrá cordialidad distante.
ARGENTINA. No está muy clara la relación entre los dos países. Durante el año 2008 hubo algunas razones para el desencuentro. El caso del “maletín” que destapó una ayuda ilegítima de Chávez hacia los Kitchner, los “papeles argentinos” cuya compra parece que, a la larga, no fue tan favorable para ese país. La nacionalización de los intereses argentinos en Sidor, todo apunta a que, en cualquier momento, la naturaleza camorrera de ambos gobiernos pudiera hacer explosión. Esperemos.
Los comentarios para China, Irán, Rusia y la Unión Europea son básicamente los mismos que para el año 2008.
Sin duda el país con el cual conviene sostener una relación comercial intensa. No es a mediano plazo una alternativa a los Estados Unidos para colocar nuestro petróleo pero es una alternativa para la diversificación energética importante. China está interesada en invertir en Venezuela. En materia petrolera aspira obtener mejores condiciones globales de las otorgadas a otros países. La empresa petrolera estatal china es competente y negocia con firmeza. Su personal tiene problemas de adaptación a la cultura del país. Los equipos petroleros suministrados a la fecha han tenido problemas operativos. Durante el 2009 la relación entre Venezuela y China continuará de manera fluida, aunque quizás se note una disminución en el interés de invertir en áreas de capital intensiva como la Faja Petrolífera del Orinoco, dada la reducción de los precios petroleros.
A pesar de los múltiples convenios firmados la alianza de Venezuela e Irán no tiene bases muy firmes para sostenerse a largo plazo ni para complementariedad industrial y comercial ni como fuentes de inversiones y tecnología tiene mucho que ofrecer. La “hermandad” actual es casi exclusivamente de carácter político y tiene la facilidad que exhiben las relaciones entre países que dependen de “acuerdos por arriba” entre dos líderes. Un cambio de gobierno de cualquiera de los dos países pudiera regresar la relación a la de países que comparten intereses en la OPEP. Muy poco más. Además, en los últimos meses se han puesto al descubierto posibles acciones conjuntas entre Irán y Venezuela que afectan la estabilidad de otros países, lo cual pudiera poner en peligro la relación entre ambos gobiernos.
Mientras se mantenga el interés de Venezuela en comprar armamento ruso las relaciones serán fluidas. En el año 2009 podrá haber una reducción importante en la compra de armamento por parte de Venezuela dada la dificultad de obtener fondos para este objetivo.
La situación pudiera ser tensa si no mejoran las relaciones de Venezuela con países como España e Inglaterra.
