domingo, 10 de agosto de 2008

“EL PLAN ENERGETICO DE OBAMA”

El candidato presidencial del partido demócrata de los Estados Unidos, Barack Obama, ha anunciado un plan para eliminar la dependencia energética de su país del petróleo importado del Medio Oriente y de Venezuela.
No es el primer plan energético de los Estados Unidos. La reducción de su dependencia ha sido un objetivo de todos los últimos gobiernos a partir del General Eisenhower después de la Segunda Guerra Mundial. Sin embargo, pese a grandes anuncios y grandes esfuerzos este país ha aumentado su dependencia energética, reducido su producción doméstica petrolera, aumentado las importaciones de petróleo y fracasado en desarrollar alternativas energéticas al petróleo de manera eficiente, barata y abundante. La historia del despilfarro energético de los Estados Unidos es tan clara que la tentación de extrapolar y concluir que, al igual que siempre el consumidor norteamericano se las arreglará para seguir desperdiciando energía, aunque en esta ocasión pareciera que los altos precios están siendo objeto de cuestionamientos políticos severos cuyas consecuencias pueden ser muy negativas para aquellos lideres que le den la espalda al problema.
A continuación algunos de los planes de Obama:
  • Invertir $150 millardos en 10 años para desarrollo de “energía limpia”.
  • Ahorrar en energía el equivalente de las importaciones del Medio Oriente y Venezuela durante los próximos 10 años.
  • Desarrollo de carros híbridos con un rendimiento de 150 millas por galón de gasolina.
  • Utilizar petróleo de la reserva estratégica para reducir el precio al consumidor.
  • Obligar a las empresas petroleras a devolverle al consumidor parte del alto precio cobrado.
  • Dar créditos fiscales para la compra de vehículos modernos de bajo consumo energético.
  • Desarrollar energía limpia del carbón.
  • Utilizarlos ya o perder las licencias para producir gas y petróleo.
  • Regular los mercados especuladores de futuros.
  • Asegurarse que 10% de la generación eléctrica provenga de recursos renovables en el 2012 y 25% en el 2050.
  • Aumento de recuperación secundaria por métodos modernos.
  • Perforación Costa afuera (en discusión).
Todo el programa estará, a su vez, inserto en un esfuerzo por reducir emisiones de gas de invernadero en un 80% para el 2050.
Lo interesante de la proposición de Obama es que combina acciones de corto plazo (reducción de precios al consumidor) con visión de futuro, identificación de plazos para diferentes acciones y costos asociados al esfuerzo.
Mientras en los Estados Unidos se desarrollan planes alternativos energéticos, aquí en Venezuela mantenemos una inexplicable inacción en materia petrolera. Seguimos sin invertir lo necesario para aumentar nuestra producción. Países como Brasil están desarrollando una política energética audaz que pudiera reemplazar a Venezuela como suplidor hemisférico seguro y confiable. No nos olvidemos que aunque los Estados Unidos sean exitosos en la política energética a futuro, pasaran por lo menos de 10 a 15 años antes de que reduzcan su dependencia en esta área de una manera contundente. Esos son los años con los cuales contamos para diversificar nuestra economía apoyados en la renta petrolera.
Debo confesar que por primera vez atisbo en el horizonte el principio del fin de la era del petróleo como la hemos vivido hasta ahora. El peligro está en que los altísimos precios de hoy no nos permitan ver la miseria potencial de mañana cuando converjan baja producción con baja demanda energética petrolera, sin haber desarrollado otras opciones para la creación de un futuro promisorio.